Altea
Situado en la provincia de Alicante, entre el mar y la montaña, se encuentra el precioso pueblo de Altea, bañado por el mar mediterráneo y situado en la comarca de la Marina Baja.
En Altea podrás disfrutar de sus hermosas playas de piedras redondeadas o visitar su casco antiguo y enamorarte de sus calles empedradas, casas blancas, rincones e increíbles miradores.
Para ir al casco antiguo te recomendamos que aparques el coche en el aparcamiento que hay al lado de la gasolinera y vayas andando. Tendrás que subir varias calles hasta llegar a la entrada del casco antiguo pero merecerá la pena, pues arriba no hay aparcamiento para dejar los coches y será mejor dejarlo abajo.
¿Cómo llegar a Altea?
Aparcamiento Altea
Sus casas blancas adornadas de flores y sus calles estrechas y empedradas te enamoraran desde el primer momento. Muchas de estas calles son escalonadas por lo que si viajas con niños en carritos tendrás dificultad para poder visitarlas.
El casco antiguo tiene bastante afluencia de personas durante todo el año, en él encontraras varias tiendas de artesanía, restaurantes y hoteles donde hospedarte.
En lo alto, coronando el cerro donde se asienta Altea, se encuentra la Iglesia de Nuestra Señora del Consuelo, su plaza es el corazón del casco antiguo y siempre está muy animada.
Iglesia de Nuestra Señora del Consuelo
Paseando por sus calles encontrarás maravillosos miradores donde el cielo se funde con el mar en un azul intenso que te dejará ensimismado y no pararás de fotografiar intentando recoger dicha belleza.
Iglesia Ortodoxa del Arcángel San Miguel
Fuera del casco antiguo y sus playas, situada en Altea Hills, existe un destino que también merece una visita y no es otra que la Iglesia Ortodoxa del Arcángel San Miguel. Esta iglesia es la primera iglesia ortodoxa rusa construida en España; todos los materiales empleados en su construcción así como la mano de obra empleada son de origen ruso. En sus alrededores verás un bonito jardín con esculturas de madera. Para acceder a su interior hay que comprar una entrada de unos 2 euros por persona.
En definitiva, Altea es un paraíso de la Costa Blanca en el que puedes perderte por su increíble casco antiguo, sus paisajes, sus calles, su historia y relajarte en sus hermosas playas. Un bonito destino que no dejará indiferente a nadie.